Los efectos de la DANA que afectó a Valencia hace tres meses todavía se sienten, aunque poco a poco los vecinos están recuperando la normalidad y el optimismo. Este es el caso del sector de la hostelería, fundamental para la economía y la vida social de la región, que está volviendo a atender a sus clientes y reanimando las calles. Gracias a iniciativas como FUERZABAR Valencia, un movimiento solidario impulsado por HEINEKEN España y sus marcas, más del 50% de los establecimientos hosteleros ya han reanudado sus actividades.
Inicialmente, más de 2.500 clientes de HEINEKEN España se vieron afectados por la DANA. En respuesta, la compañía reactivó en noviembre FUERZABAR, un movimiento de apoyo a la hostelería que se originó durante la pandemia. Este programa no solo ofrece donaciones de productos de marcas como Heineken®, Cruzcampo, Amstel y El Águila, sino que también incluye un plan de apoyo que supera los seis millones de euros. Este plan abarca la reposición de instalaciones dañadas, la provisión de material esencial para los negocios, como mobiliario de terraza y grifos, así como financiación económica, asesoramiento legal y técnico, y gestión de subvenciones.
Además, otras empresas importantes como Nestlé, PepsiCo, Danone, Suntory Beverage & Food Spain y la valenciana Muñoz Bosch también han contribuido con sus productos, como Schweppes®, La Casera®, Lipton®, y artículos de limpieza.
Según Etienne Strijp, presidente de HEINEKEN España, la compañía está comprometida con la recuperación de la Comunidad Valenciana y sus hosteleros. Este compromiso se extiende más allá de la hostelería, ya que HEINEKEN España, que cuenta con una fábrica en Quart de Poblet y cerca del 20% de su plantilla en la región, implementó diversas medidas de apoyo para sus empleados tras la DANA. Estas medidas incluyeron una línea de crédito sin intereses, opciones de movilidad y un refuerzo en la asistencia médica y psicológica. Además, los trabajadores impulsaron una plataforma de crowdfunding que recaudó 81,000 euros, destinados a la ONG Casa Caridad, para asistir a los afectados por la catástrofe.